Alguien derribó el portal
 y se fue como quien huye.
 El tiempo todo lo engulle:
 el canto, la fe, la sal…
 Donde tierra, lodazal,
 donde alegría, punzada,
 donde yo tuve una almohada
 existe una mancha gruesa
 y donde estuvo la mesa
 hay una ausencia sentada. 
De Glosas y azares
 
											 
   
  
 
						













